29/9/08

"Calcetines con Ideas Para los Que Pensamos Con los Pies..."

“… ya que no lo hacemos con la cabeza”.


Cuando tuvieron lugar los incidentes en París en 2007 con motivo de la elección de Sarkozy como Presidente, no hacía más que pensar una cosa: cómo se mueven los franceses, siempre tan revolucionarios y protestones… que cuando algo vulnera sus derechos se movilizan. ¡Y los estudiantes! Tanta vitalidad, curiosidad por el mundo político, tanta acción social y política. Esos sí que tienen sangre revolucionaria.


¿Y en España? Me preguntaba ¿Por qué somos tan apáticos frente a la política? ¿Por qué nos importa tan poco que modifiquen, limiten o vulneren nuestros Derechos?


Dicen los que vivieron la transición y los 80 que somos una generación apática, sin curiosidad por nada ni por nadie, que no nos movilizamos nunca, que tenemos la información y los medios a nuestro alcance pero no lo utilizamos para el futuro. Ni siquiera para el presente.


¿Somos la generación dormida? No luchamos, no protestamos, no nos interesamos por la política, ni por temas sociales…Cambian la Ley de Educación por un plan totalmente incoherente y, prácticamente, sin futuro y nos callamos, no nos manifestamos. Por no hacer ni siquiera pensamos en ello.


Muchos afirman que somos una generación con pocas aspiraciones, la de los contratos basura y temporales, la manipulable, fácilmente manejable… Sin embargo, creo que esto está cambiando. Dentro de mi círculo de amigos cada vez más nos interesamos por la política, por las medidas que se toman en nuestro nombre, no nos gusta que los políticos se rían de nosotros. Sin embargo, solo nos quejamos, no hacemos nada… En España (y más en Madrid) hay tantas manifestaciones de las que no nos enteramos. No estamos informados aunque tenemos toda la información que queramos conseguir.


Nuestros padres lucharon por un país libre, en el que las ideas no significaran la muerte, en el que diferente no significara peligroso. Muchos murieron en esa lucha, otros vieron cómo España se convertía en un país libre… Y nosotros, que hemos disfrutado siempre de ello, parece que nos creemos que lo merecemos todo sin hacer nada para conseguirlo, sin protestar cuando nos lo quitan, sin luchar por mantenerlo.


Yo creo que hemos llegado a un punto en el que, efectivamente, hay una generación menos activa que las que le preceden. Sin embargo, no creo que sea la nuestra. Nosotros estamos despertando, poco a poco, pero llegará el momento en el que sí nos movilicemos y luchemos por los derechos que nos asisten. El problema que veo es que parece ser que ese momento llegará con algo definitivamente agresivo. Me explico. Parece que para que reaccionemos tenemos que vivir una agresión límite, una violación de nuestro estatus tal que haga que nos movamos.


Un ejemplo que me parece muy bueno de ello fueron las manifestaciones contra la Guerra de Irak. En esos momentos todos nos concienciamos de que eso “era pasarse”, algo que no íbamos a tolerar. Es en ese momento en el que reaccionamos y decimos: no, hasta aquí.


El inconveniente de ello es que nos dormimos de nuevo con bastante facilidad.

28/9/08

Cuando la Adicción Controla Tu Vida

El fin de semana pasado me atracaron por primera vez en mi vida. Solo me habían robado una vez y ni siquiera me enteré hasta que no encontré la cartera. Pero esto fue diferente por muchos motivos. Primero, el atracador era un drogadicto. Segundo, tenía un cuchillo. Tercero, me dio muchísimo que pensar.


El hombre se llevó el poco dinero que teníamos sin poder creerse que su atraco no le fuera a dar más frutos que 10 euros. Sin embargo, pensándolo bien, 10 euros para un heroinómano es todo un mundo, por lo menos una noche de evasión.


Tiene que ser horrible vivir así. Después de hablarlo durante un largo rato con las demás personas que estaban conmigo concluimos que vivir así no es vida. Todo el día pensando en el siguiente colocón, en cómo conseguir dinero para conseguir droga. Te despiertas por el “mono”, porque te duele el cuerpo, porque no puedes seguir durmiendo sin un poquito de droga más…


Cuando se iba, “el atracador” incluso se disculpó con nosotros. “Lo siento chavales, estoy muy enfermo” así se despidió. El pobre hombre todavía estaba en ese estadio de la adicción en el que es consciente de lo que ocurre, de que es un marginado social, de que la gente que le rodea le tiene pena, miedo… Que vive por y para la droga.


¿No tiene que ser horrible vivir así? Las drogas tienen ese reverso. Cuando empezamos a fumar porros o a beber alcohol, nadie se plantea la posibilidad de acabar así. No obstante, el hecho es que sí es una posibilidad y que está más cerca de lo que creemos. Todos somos adictos a algo… Muchas personas no pueden salir sin beber porque no se lo pasan bien, no pueden hacer un viaje en bus de 5 horas sin fumarse un porro o no pueden pasar unas horas sin un cigarro.


La mayoría de los heroinómanos tuvieron que empezar por algún sitio.. y no fue inyectándose heroína en vena. Seguramente empezaron con los porros, pasaron por la cocaína y las pastillas y culminaron con la heroína. Supongo que el secreto está en tener las cosas claras y saber cuál es el límite. Saber decir: Hasta Aquí. El problema está en que no solemos reconocer nuestras adicciones. El que fuma tabaco afirma un millón de veces que puede dejarlo cuando quiera, pero que no quiere, por el momento. Con el hachís y la Marihuana supongo que pasa algo parecido.


Espero que ninguna de las personas a las que quiero acabe como el hombre que nos atracó. Espero que todos sepan imponerse unos límites.

18/9/08

¿A Dónde Irías Con Una Máquina del Tiempo?

Vivimos en un mundo que ha vivido millones de años, por el que han pasado miles de millones de personas y donde han tenido lugar innumerables acontecimientos. Si tuviéramos una máquina del tiempo ¿A dónde iríamos primero? Ayer lo hablaba con L. Si yo tuviera una máquina del tiempo viajaría tanto al pasado que me olvidaría de vivir el presente. Imagina poder vivir en la era de los Dinosaurios (desde lejos), poder contemplar a esos gigantescos lagartos, el mundo y su paisaje conviviendo con ellos. O poder trasladarte a la época de apogeo del Imperio Romano, ver el Coliseo lleno, las relaciones sociales, esa civilización que ha asentado las bases para toda civilización posterior, las batallas, la emoción de las conquistas. Contemplar cómo se construía una pirámide, vislumbrar a lo lejos a uno de los grandes faraones egipcios en su carro tirado por majestuosos caballos, sentir el respeto debido a un Dios al verlo.

Si lo pienso bien, no sabría elegir sólo un momento. Me hubiera encantado vivir a los Beatles y los 60, la movida madrileña, la transición española. Vivir la emoción, la sensación de libertad cuando Franco murió. La incertidumbre ante lo que se venía, el movimiento estudiantil. Todo. Cuando los árabes ocupaban España y las tres grandes religiones convivían perfectamente, sin ningún problema y con total tolerancia. La mejor época de esplendor de España, si quieren mi opinión. Cómo se vivió la Revolución en Cuba, cuando Fidel se consagró como líder indiscutible. La llegada de los españoles a América, vivir la China milenaria.

Pensándolo mucho, hasta me encantaría ver un discurso de Hitler. Me cagaría de miedo, obviamente, pero tiene que ser impresionante ver a todas esas personas siguiendo a su líder, al carismático Hitler, sin saber lo que vendría después. Me encantaría haber presenciado los juicios de Nuremberg, verles las caras y sus reacciones a la justicia.

Hay tantos momentos que han marcado nuestra historia que podría hacer una lista interminable. A lo mejor ya hay una máquina del tiempo. A lo mejor ya hay alguien que haya viajado al pasado. A lo mejor es mejor que no lo sepamos precisamente porque nos obsesionaría tener todos los detalles de lo ocurrido. La necesidad de saber de dónde venimos es algo que trae al ser humano de cabeza desde que tiene los medios.

No sé yo los estudiosos y científicos, pero lo que es yo seguro que no pasaría mucho tiempo en el futuro.

17/9/08

"Alejad Vuestros Rosarios de Nuestros Ovarios"

Así rezaba una octavilla de propaganda a favor de un “Aborto libre y gratuito”. Me dio qué pensar. La verdad es que nunca me había planteado la segunda parte: gratuito. Respecto al aborto libre, por supuesto, estoy a favor. Con determinados límites, es decir, llega un momento en el que el feto ya es un ente con vida independiente y viable (no estoy segura si a los 3meses), pero hasta ese punto creo que cada mujer debe poder elegir.


Las circunstancias de la vida nos pueden llevar a encontrarnos, de repente, embarazadas o, en el caso de los hombres, con que su pareja está embarazada. Puede ser por muchos motivos: que el preservativo se rompe, el 0,01% de no efectividad de la píldora entra en acción, la marcha atrás (“Tranquila que yo controlo”), un calentón en el que piensas “bah, no va a pasar nada, por una vez no me voy a quedar embarazada”, etc, etc, etc.


Creo que debería diferenciarse entre los accidentes de las irresponsabilidades. Si no pones ningún interés en evitarlo, no me llores más tarde. Es decir, todos cometemos errores pero hay que tener un poco de cabeza.


Respecto a lo del aborto gratuito, en eso ya no estoy tan de acuerdo. Imaginemos que el aborto fuera libre, los razonamientos mentales de miles de jovencitas antes de echar un polvo sin condón: bueno, si me quedo preñada aborto y ya está. Por suerte o por desgracia, la mentalidad que tenemos es la de evitar por cualquier medio el aborto. Por nuestros padres, por el dinero, por lo que sea, pero lo intentamos. Desde el momento en que la pastilla del día después podía conseguirse sin la autorización paterna los índices de demanda han subido increíblemente.


Llegado a este punto se me plantean muchas preguntas, entre las que destacan: ¿Pasaría lo mismo si el aborto fuera gratuito? ¿Qué pasa con las enfermedades de transmisión sexual?


Si el aborto fuera gratuito creo muchas jovencitas prestarían menos atención a los embarazos, utilizando menos el preservativo y, en consecuencia, abriendo las puertas a la transmisión de enfermedades varias, incluido el SIDA. Aclaración: no es una generalización, hay jovencitas muy concienciadas respecto a la "seguridad sexual" pero hay muchas otras (la mayoría) poco informadas. Ya había apuntado que el índice de personas portadoras del VIH es algo mayor entre los hombres homosexuales, el porqué es simple: no hay riesgo de embarazo. Entre los heterosexuales, ya con la píldora del día después, el uso del condón cada vez se olvida más entre los jóvenes entre 14 y 18 años. Por que lo que temen en esa época de su vida es que un posible embarazo les estropee la vida. Si el aborto fuera gratuito ¿no pasaría lo mismo?


La verdad es que es un tema confuso y en el que no tengo una postura claramente definida. Por una parte abogo por que cada uno pueda hacer y deshacer con su cuerpo lo que quiera y cada uno es responsable de lo que le ocurre y de las decisiones que toma. No obstante, tampoco creo que el aborto gratuito sea una opción viable. Deberían establecerse unos determinados límites, plazos, edades mínimas y máximas, abortos posibles en un plazo de tiempo, exámenes psicológicos y ginecológicos…



Así, como determinadas operaciones de transexualidad ya son soportadas por la Seguridad Social en España, creo que algunos casos de aborto también deberían serlo. Pero debe examinarse caso por caso. No creo que el aborto, en este país, llegue a ser libre y gratuito, por lo menos en un par de generaciones. El sector conservador y, aún el liberal moderado, es demasiado influyente para que un Presidente del Gobierno lo proponga siquiera. Pero aunque esto no sea un impedimento.... No creo que podamos afrontar las necesidades que esa medida crearía: la cantidad de médicos abortistas necesarios, el dinero para poder crear infraestructuras, poder llevar un ritmo de citas suficiente y rápido, ya que los abortos no se pueden practicar después de un tiempo.


Claro que por otro lado, si el aborto es libre pero no me lo puedo costear, en cierto modo, se me está negando ese servicio o derecho. La verdad, estoy confusa. Sólo quería trasladarles mis dudas y cavilaciones al respecto.

16/9/08

Tomar Decisiones

Hoy me siento vacía. No sé cómo llenar mi tiempo. Madrid me ofrece miles de cosas que hacer pero no sé cuál de ellas elegir. Era más fácil cuando no tenía todo el tiempo del mundo. Cuando en una tarde tenía que integrar todas las cosas que me gustaría hacer. Sonará inconformista e incluso a pataleta de cría pero resulta que cuando no podía disfrutaba muchísimo más de las cosas que hacía que ahora, que no tengo nada que hacer.

Ni trabajo, ni estudios.. los exámenes se fueron para dejar su gran vacío. Durante un mes y medio solo he pensado en ellos, en los temas que me quedan, en cómo iba a organizarme para estudiármelo todo, en el tiempo que me restaba para llegar al final. El final ha llegado y ahora resulta que no sé qué hacer. Estaba tan obsesionada pensando en el final del encierro que ahora que ha llegado mi libertad no tengo ni idea de cómo ser libre. Tengo planes, gente con quien quedar, pero no sé qué me apetece.



¿Será que solo queremos lo que no tenemos? Nos pasamos la vida esperando que lleguen determinados momentos: el fin de exámenes, el fin de carrera, el fin de semana, las vacaciones… pero cuando llegan, muchas veces, no sabemos qué hacer. Creo que mi problema es que no puedo elegir, soy demasiado indecisa. Quiero aprovechar el tiempo al máximo, hacer mil cosas… El problema es que no sé elaborar una lista con las cosas más importantes. No sé aprovechar el tiempo. Solo me sale hacer algo así cuando estoy hasta arriba de cosas que hacer y obligaciones varias. Cuando estoy tan agobiada que busco un hueco de donde sea para un café, una caña… ¡cualquier cosa!

Se me ha ocurrido una idea un tanto descabellada. El vacío que dejan los exámenes se parece bastante al vacío que deja una pareja cuando te deja y llevaban mucho tiempo juntos. De repente estás desorientada, no sabes muy bien qué hacer, con quién quedar… tienes tanto tiempo que puedes aburrirte del aburrimiento. Puedes mirar el techo durante horas, sentarte en un banco mirando a la gente que pasa toda la tarde que no pasa nada porque tienes mucho tiempo para lo que quieras y te apetezca.

El problema es que quiero invertir mi tiempo en algo productivo. Me explico, estoy acabando la carrera, me gustaría ponerme a hacer mil cosas para seguir adelante pero hay tantas y tantas posibilidades que no sé por donde empezar. Se abre un mundo totalmente nuevo para mi. Mi vida había estado planeada hasta este momento. Justo ahora es cuando empieza la verdadera incertidumbre. Desde pequeña he sabido que después del cole venía el instituto y, después de éste, la universidad. Lo que venía después de la universidad nunca me lo planteé, lo veía tan lejano que no pensé nunca en ello. Ahora me doy de bruces contra ello. Directamente. La vida me acaba de enseñar un gran muro que no sé cómo traspasar. Estoy tan perdida que apenas sé qué será de mi vida en un mes.



Es el momento de tomar decisiones por nosotros mismos. Es el momento de probarnos y de responsabilizarnos de lo que pueda salir mal. Antes, siempre tenías a tus padres para ayudarte y ahora, aunque siempre estarán ahí para apoyarte, estás sola ante “el peligro”. El miedo a tomar una decisión equivocada me paraliza, sinceramente. Sé que aún soy joven y que si me equivoco ahora aún tengo tiempo de enmendar el error, pero aún así, supongo que como todo el mundo, me encantaría tener una vida llena de decisiones correctas y ningún paso atrás.

Veremos lo que el futuro nos depara. Por ahora, mi plan más inmediato es tomarme un café mientras leo un buen libro (y no apuntes), algo que deseo hace mucho tiempo. No está mal para empezar, ¿no?

13/9/08

Cómo Engañar al Mundo Entero

Estoy flipando. Ayer vi un documental sobre Tania Head, una mujer que afirmaba haber sido superviviente del 11 de Septiembre. La historia que contaba era que trabajaba en la planta 78 de la torre Sur cuando tuvieron lugar los atentados. Su novio murió en la torre norte ese día y, supuestamente, iban a casarse al salir del trabajo.


Tania Head junto al Alcalde de Nueva York en el primer acto en el World Trade Center en el que pudieron participar los supervivientes.



Tania se convirtió en la presidenta de la Red de Supervivientes del World Trade Center, engañó a los demás supervivientes y a medio mundo. Fue una de las “estrellas” de la tragedia, su historia se convirtió en un símbolo en EEUU, la historia de una mujer que había vivido el peor atentado de la historia, perdido a su prometido el mismo día y que, aún así, seguía adelante. Ayudaba a la gente, les escuchaba e hizo muchas cosas buenas por la Red de Supervivientes.


6 años después del atentado el New York Times empezó a investigar a esta mujer. Encontraron incoherencias en su historia que cada vez se hacía más grande y valerosa. Después de meses de investigación, descubrieron que Tania se llamaba Alicia Esteve, el día del 11 de Septiembre ni siquiera estuvo en Nueva York ya que se encontraba en un curso de Económicas en un centro de estudios de Barcelona. La familia de su supuesto prometido ni siquiera había oído hablar de ella y sus conocidos y familiares corroboraron que su brazo quemado (la única secuela que pareció dejarle el atentado) lo tenía así desde mucho antes del 11-S. (Ver Noticia NY Times)


Una impostora en toda regla. Esta mujer jugó con los sentimientos de miles de personas, provocó que el mundo sintiera lástima de ella, la admiración de los demás supervivientes. Engañó a todo el mundo. Sin embargo, según las leyes estadounidenses no cometió ningún delito por lo que Tania (o Alicia) cogió un avión y se fue de EEUU, dejando todo atrás. Desde entonces no se sabe nada de ella, lo único que se ha descubierto son más detalles de su pasado que no reproduciré aquí porque no vienen al caso.


La razón de mi consternación viene dada por el hecho de que viviera una vida que no era la suya durante 6 años. Creó la vida que siempre quiso, llena de aceptación, cariño y admiración por parte de los demás pero se basó en mentiras y engaños. Jugó con todos los que la rodeaban, y lo hizo bien. Si no fuera por la investigación del New York Times, Tania seguiría siendo un símbolo.

¿Podemos hacer una maleta, coger un avión y crear una vida nueva? ¿Así, tan fácil? Tania se inventó una historia creíble. No obstante, aunque no hubiera sido tan coherente, ¿quién iba a dudar de alguien que afirmaba haber sufrido tanto? Se inventó una historia tan perfecta que, al final, creó sospechas. La decepción en la voz de los que estuvieron a su lado es palpable en la voz cuando les entrevistan en el documental.


¿Cómo pudo jugar así con los sentimientos de personas que habían sufrido tanto? ¿Cómo pudo engañar a tanta gente? ¿Cómo dormía por las noches? ¿No tenía miedo de ser descubierta? Creo que debe ser una auténtica tortura psicológica vivir así 6 años. Tienes que tener la mentira muy bien aprendida porque sino, tarde o temprano, algún detalle cambiará, alguna parte de la historia se desvía y la gente se dará cuenta de que mientes. Vivir así, con el miedo constante a que te descubran, siempre pensando en lo que le has contado a éste o a aquél para no meter la pata…


Realmente, esta mujer me da mucha pena. Hay que quererse muy poco y estar bastante mal de la cabeza para hacer algo así.


Como decía mi madre: antes se coge a un mentiroso que a un cojo.

12/9/08

El Día Que Cambió El Mundo

Disculpen que no hiciera mención ayer a un día tan importante. Sinceramente, no sabía muy bien cómo enfocar los sucedido el 11 de Septiembre de 2001 en Nueva York y, sobre todo lo que vino después.

El 11-S significó muchas cosas. Para los familiares una tragedia, para los neoyorquinos un duro golpe a su integridad y estabilidad, para el resto del mundo la conmoción, para el mundo árabe el comienzo de una época en la que serían insultados, injuriados y marginados. Para muchos españoles es el antecedente directo del 11-M y para los londinenses del 7-J... Para mi, personalmente, es el reflejo de la tragedia humana más impresionante que se ha vivido la historia del mundo más reciente.

Recuerdo que el 11-S aún vivía con mi madre. Me despertó a la 1 de la tarde para contarme que un avión se había estrellado contra una de las torres gemelas. No imaginé la embergadura de lo que ocurría hasta que, ya frente al televisor, vivimos cómo se estrellaba el segundo de los aviones. Las imágenes de ese día, no las voy a poder olvidar: personas tirándose desesperadas por las ventanas, familiares corriendo hacia las Torres Gemelas para estar cerca de los suyos, el caos y la confusión de los que, simplemente, pasaban por allí.

Solo de pensar en la cantidad de personas que murieron ese día (casi 3.000!!!!) se me eriza la piel. Tanta gente inocente, tantas familias rotas por el dolor. Los días posteriores aparecieron mensajes dejados en el contestador de sus familiares por las personas que iban en los aviones o las que no podían salir del edificio, testimonios de bomberos y policías... un sinfín de dolor. Para mí ese día signifca sufrimiento y conmoción, al igual que el 11-M, me faltaba el aire y no podía parar de llorar. No entendía cómo alguien era capaz de llevar a cabo un acto tan atroz.

Hoy, EEUU, después de invadir Irak y buscar hasta debajo de las piedras a Bin Laden, no ha olvidado a sus víctimas pero sí a las víctimas de Irak, tan olvidadas hoy. Nadie sabe qué sacaron en claro de esa guerra, porque al final, simplemente, se fueron dejando al país desolado y sumido en el caos absoluto. Miles de civiles inocentes, cuya existencia ya era difícil antes del 11-S, vivieron y pagaron con su propia sangre los actos terroristas de otros que no tenían nada que ver con ellos. Mercaderes, ganaderos, agricultores, amas de casa... personas que solo querían seguir con su vida y las cuales, incluso, lloraron con nosotros las pérdidas de los atentados.

El 11-S para George Bush significó la excusa perfecta para invadir un país, para iniciar la loca búsqueda de un terrorista árabe sin pensar en nada más y, mucho menos, en las consecuencias. Después vinieron las ilustraciones de Mahoma en las revistas, la provocación a los árabes, la indignación de éstos por la actitud que occidente estaba tomando.

Gunter Grass por esa época escribió un artículo que se titulaba "¿De dónde saca occidente su arrogancia?" porque, digo yo, cierto es que tenemos libertad de expresión e información pero si sabemos que para los árabes las caricaturas son una provocación ¿Por qué lo hacemos? ¿Qué sacamos de ello? Los culpables de los atentados no se sentirían, probablemente, afectados, pero sí que se sentirían ofendidos los ciudadanos de a pie, los musulmanes de todo el globo que seguían adelante como podían después de que prácticamente toda la población occidental les diera de lado, les llamara terroristas y fanáticos.

Recuerdo que a una chica musulmana unos chicos la increparon en una cafetería porque era "una de ellos" una radical y fanática religiosa, "seguro que rezas porque vuelva a ocurrir lo mismo, ¿verdad?" le dijeron. Yo no pude más que alucinar y la pobre chica lo único que hizo fue aguantar la cabeza alta y, por supuesto, las lágrimas que inundaban sus ojos.

¿Qué significó el 11-S? Fue día en el que el mundo cambió, para mal. Un día en el que perdimos casi a 3.000 personas a las que se sumaron todas las que perecieron en Irak (tanto civiles como militares estadounidenses, españoles, ingleses...). Un día en el que la ley del "todo vale" se instauró en muchas de las medidas tomadas a continuación. Un día triste para el mundo.


A todas la víctimas de ese día y de después, que descansen en paz.

11/9/08

La Tolerancia Absoluta ¿Es posible?

¿Podemos tolerar absolutamente todas las ideas y comportamientos de nuestro alrededor? ¿Podemos tolerar igual a una persona de ideología contraria a una de ideología nazi? ¿Podemos tolerar las ideas políticas de los etarras? ¿Y a los fanáticos religiosos?

¿Cuáles son los límites de la tolerancia?

Llevo varios meses dándole vueltas a esto. Muchas personas se proclaman tolerantes y, sin embargo, llegado el momento de su boca salen afirmaciones tales como: “A los etarras habría que matarlos a todos” o “Los neonazis son todos unos H**** de P***, no merecen ni vivir”.

Tal y como yo lo veo si eres tolerante debes serlo para todo, siempre y cuando se respeten determinadas libertades y derechos de los demás. Me refiero, obviamente, a los Derechos Humanos (a la vida, integridad física, libertad ideológica…). Si yo tengo el derecho a expresar mis ideas libremente ¿Por qué una persona de ideología fascista no va a poder hacerlo? ¿Por qué no puede una persona racista expresar sus opiniones y argumentarlas?

Probablemente los que argumentan que si los radicales del nacionalsocialismo de Hitler pudieran acallar mis opiniones con violencia o incluso matándome lo harían, tengan razón. Pero quién soy yo para adelantarme a los acontecimientos. ¿Desde cuándo defendemos el castigo preventivo a todos y todo lo que va en contra de nuestros ideales o modos de vida? ¿Vamos a encarcelar a todos los independentistas vascos por si acaso alguno de ellos comete un atentado? Cierto que los neonazis buscan pelea allá a donde van, salir por el Barrio del Bernabeu de noche no es nada seguro, sobre todo si tienes rasgos latinoamericanos o africanos. Pero también es verdad que los radicales de izquierdas vienen a ser la misma mierda. Ambos defienden sus ideas a través de la violencia, pero no porque ellos lo hagan voy a hacerlo yo también. Tampoco por que seamos tolerantes significa que debamos aceptar este comportamiento, claro que no. Aquí entra en juego el sistema judicial (que no siempre es efectivo, como todo).

Por otro lado, siempre hay una excepción, hay nazis que solo expresan su opinión como podría hacerlo yo, sin vioencia. De hecho, en mi carrera te enseñan que muchas de las garantías de los Derechos Humanos están ahí por ese 1% de los presuntos delincuentes que realmente son inocentes.

Por favor, que nadie me malinterprete. En ningún caso estoy justificando a los que creen que los negros son “mierda”, los árabes unos terroristas y los homosexuales unos enfermos mentales. Por supuestísimo que no. Pero tampoco creo que debamos pegarles a todos un tiro, porque esa es una de las posturas que muchos de ellos adoptan respecto a nosotros y no pienso ponerme a su altura. Matar a una persona simpatizante de los etarra es hacer, exactamente, lo mismo que ellos: quitarle la vida a una persona por sus ideales. Cada uno elige el camino que elige, lo que veo claro es que nadie tiene el Derecho de decidir sobre la vida o la muerte de otra persona. NADIE.

Por eso es que en España la cadena perpetua y la pena de muerte han sido abolidas. Porque se supone (solo se supone) que nuestro sistema carcelario es un método de reinserción. Es cierto que hay personas cuyos actos han sido tan aberrantes y horribles que no merecen vivir, desde mi punto de vista, pero no seré yo las que le condene a la silla eléctrica. Más víctimas no van a resucitar a nuestras víctimas. Por eso admiro a los familiares de las víctimas de ETA que lo condenan con palabras, con actos pacíficos y que se niegan a llegar a su nivel reclamando venganza y su vida.


¿La tolerancia cero es posible? Pues no sé si alguien podrá tener esa capacidad, pero yo, desde luego no puedo quedarme callada cuando un hombre está poniendo a las mujeres de putas para arriba, o cuando oigo a alguien despreciar a los árabes, rumanos, africanos… porque “nos roban el trabajo” o simplemente porque el color de su piel es diferente.

Mas Vale Prevenir Que Curar

"Hola! ¿Qué Tal? ¿Dónde Andas?" Preguntó alguien en el auricular de mi teléfono móvil. "Aquí, en Tribunal que me voy a hacer la prueba del Sida" Contesté. Al otro lado del teléfono el silencio podía palparse, la tensión del momento podía cortarse y la sorpresa de mi interlocutora fue tal que casi me hizo reir. "No te preocupes, le dije, es solo prevención" y la conversación pasó a temas mucho más triviales, sin mencionar de nuevo "la prueba".


Ayer fue un día decididamente "raro", o especial, según cómo se mire. Empezó de una manera extraña y siguió siendo así hasta que me acosté. Una de las rarezas fue esa, la prueba del VIH que decidí hacerme. Paseaba por Tribunal con unas amigas cuando vimos un stand de prevención contra el Sida y que en una caseta móvil al lado realizaban la prueba de forma gratuita. Al ver que los resultados tardaban apenas unos 15 o 20 minutos dijimos ¿Por qué no? Nunca está de más asegurarse. Y la hicimos. No miento si os digo que fueron los 20 minutos más angustiosos que he vivido en mucho tiempo.

Al principio todo va bien, haces bromas, firmas la autorización voluntaria y hablas con el hombre que te explica más o menos de qué va la cosa. Sin embargo, en uno de los silencios que se producen comienzas a pensar. En toda mi vida he cometido muy pocas "conductas de riesgo", como se llaman, es decir, no utilizar preservativo, pero en ese momento me volvían a la mente una tras otra sin poder evitar pensar ¿Y si a la salida me dicen que tengo el VIH? ¿Qué hago? Cuando alguno de tus acompañantes comienza a pensar en voz alta, el nerviosismo se va convirtiendo en auténtico pánico, piensas si realmente quieres saberlo, si es bueno que hagas la prueba. Menos mal que siempre hay alguien sensato a tu lado que te dice algo así como: pues mira, si lo tienes así ya lo sabes y puedes empezar a tratarlo, lo cual se traduce en 10 años más de vida.

Pero en el momento eso te suena a cuento chino y piensas que realmente vivir en la ignorancia no está tan mal. La ignorancia da la felicidad, ¿no? nunca se me había ocurrido un mejor ejemplo para ilustrar ese dicho popular.

La prueba consiste en un pequeño pinchazo en el dedo, no duele, es más, ni te enteras de que te han pinchado. Luego los temidos 20 minutos de espera. Intentas hablar de cosas estúpidas para relajar la tensión pero no puedes dejar de repasar tu vida. La diferencia, en este caso, entre un "sí" y un "no" es tan tan abismal que aterra. Hacía tiempo que no me planteaba tantas cosas en tan poco tiempo. Repasas una a una tus parejas sexuales, las conductas de riesgo, los posibles errores y, aunque hay algún que otro detalle, te consuelas pensando que no tenían pinta de ser portadores del VIH pero claro, nunca se sabe.

Te das cuenta de lo fuerte que es tu cuerpo. Durante 3 meses lucha día a día contra el virus sin que éste se pueda detectar en la sangre. Pero siempre gana. El VIH siempre sale victorioso de esa lucha sin cuartel que se produce en tu cuerpo sin que tú lo sepas. Después de eso pueden pasar años sin que se manifieste. De hecho, puede que pasas el resto de tu vida tranquilamente, portándolo, pero sin que debilite tu cuerpo, sin que destruya tu sistema inmune.

De repente piensas en lo que harías si te dijeran que el resultado es positivo. En mi lugar, creo que me quedaría en shock, no creo que reaccionara ni que lo asimilara por lo menos en un par de días. Luego llamaría a mi madre. Hay cosas y cosas en la vida, pero que te digan que tienes un virus que, probablemente, acabará matándote por un descuido de una noche, por un hecho que, en su momento pensaste, es una tontería tiene que ser muy muy duro. Siempre pensamos "No me va a pasar a mi" pero eso lo piensan miles de personas cada día respecto a muchas cosas. y les toca. Pero ser el culpable de la muerte de tu cuerpo, del fin de tu vida está a otro nivel. Lo mismo se puede decir del tabaco, del alcohol y de las drogas en general. La diferencia con el Sida es que hace falta solo un descuido, solo uno, para que marques el resto de tu vida.


Hay personas que nacen portando el virus, que no se contagiaron conscientemente, a la que han engañado, o que, en efecto, han tenido relaciones sexuales sin pensar en las posibles consecuencias. Conocí a un hombre que tenía Sida. Era mi profesor de cerámica en el colegio,. Amable, simpático y muy buena persona. Yo era muy pequeña y apenas me acuerdo pero cuando murió recuerdo que lloré mucho su muerte y que no entendía como una persona podía morir de neumonía. Pepe se llamaba.

Hay que normalizar un poco el hecho de que alguien pueda tener el Sida, no debemos dejarles de lado por eso. La sociedad nos ha enseñado que el Sida es tan malo que solo con que alguien nombre que es portador produce en nosotros el impulso de alejarnos lo antes posible de ese individuo. El problema es que esta actitud esta mal. Siguen siendo personas y mucho más fuertes, valientes y valiosas que todos los demás. Primero, porque han asumido su muerte y han decidido afrontarla. Y segundo, porque su vida es finita, todo lo que esas personas podrían aportar al mundo se ha truncado, ya sea porque mueran en el camino o porque se dediquen tanto a luchar contra el virus que se olvidan casi de vivir. Hay que apoyarles por todo ello.

Finalmente, "Bueno, el resultado es negativo, ¿Ves? esta rayita solitaria significa que no eres portadora del VIH. Lo único que falta por decir es que folles mucho pero con condón. Más vale prevenir que curar ¿no?" Y con esa frase acabó la tortura psicológica que me había infringido a mi misma durante los últimos 15 minutos.

El "No", mas deseado de toda mi vida, os lo aseguro.

P.D: se recomienda que cada persona se haga la prueba cuando tiene una vida sexual activa y ha tenido relaciones sexuales con varias personas. Si quieren hacerse la prueba el mismo stand va a estar los miércoles y jueves todo el año, durante todo el día, en la Calle Fuencarral, al lado del Mercado de Fuencarral (Metro Gran Vía o Tribunal). Aunque solo sea por prevención, todos deberíamos hacerlo en algún momento.

8/9/08

La Perfección

Hay que ver lo que da de sí un día en exámenes. La inspiración me ha llegado hoy como una nevada en pleno verano: innecesaria, inoportuna, pero sorprendentemente agradable. Debería estar estudiando, pero millones de ideas flotan en mi cabeza, algunas sin perfilar, otras apenas comienzan a nacer y otras comienzan a concluirse.

Es algo sabido por todos que las personas necesitamos soñar para no volvernos locos. ¿Qué sería de nuestras vidas sin poder imaginar lo que sería si...? Imaginar las palabras perfectas para el momento perfecto, el beso perfecto, la cena perfecta, el paseo perfecto, el trabajo perfecto.. La Perfección.. ¿La buscamos porque realmente la necesitamos o porque nos enseñan que es lo que hay que buscar? Últimamente la televisión nos lanza sin parar el mensaje de que ser imperfecto es sinónimo de especial, que la perfección está desfasada, que lo mejor es ser natural.. Pero por otro lado las películas siguen teniendo los finales made in Holliwood con el que todos soñamos, las revistas nos muestran a mujeres y hombres perfectos físicamente y los libros historias de amor épicas. Encontrar una historia imperfecta en el mar de información que nos lanzan a diario es como intentar "nadar en gelatina".

¿Cómo son las historias en la vida real? ¿Realmente hay alguna perfecta? Para contestar a esta pregunta primero tendríamos que poder definir la perfección porque, además de deseada es imprecisa y muy muy subjetiva. ¿Qué es la perfección para una ama de casa con 3 hijos y un marido ausente? ¿Qué es la perfección para una veinteañera obsesionada por la moda y los hombres? ¿Qué es para un alto ejecutivo internacional? ¿Y para un dependiente del MacDonalds o para el director de una ONG? ¿Coincidirá la concepción de alguno de ellos con la de otra persona más en el mundo?



Volviendo a las historias de la vida real... Hay un mar de peces ahí fuera lleno de ellas. Y ninguna es perfecta. La maldita perfección tiene la manía de crecer con el tiempo. Así, cuando a los 22 años conseguimos el ideal de perfección que teníamos con 18 años, ya no nos sirve porque ha cambiado. En mi corta vida he llegado a la conclusión de que la perfección no existe y mi definición es tan imprecisa, incoherente y confusa que no creo que nadie la entendiera. ¿Debemos buscar la perfección o ya somos perfectos pero no lo podemos ver? ¿Es cierto que las imprefecciones de una persona la hacen perfecta?

En la búsqueda de la perfección han perecido personas muy valiosas para el mundo. Han perecido miles de mujeres por dejar de comer para tener el cuerpo perfecto, las almas de muchas personas que buscaban un mundo perfecto se han vaciado, al igual que muchas personas han desaparecido en la tristeza de no encontrar el amor perfecto, sabios y filósofos de todas las épocas y países han intenado definirla y les ha obsesionado encontrarla. ¿De verdad es para tanto?

¿No podemos, simplemente, no buscar la perfección y ser tal como queremos ser?

Al Pasado Le Dijo Adios

"Con la mano levantá, al pasado le dijo adios y el futuro que vendrá dicen que pende de un hilo, y el presente aqui contigo, mano a mano, oye mi hermano disfruta el camino" Macaco

Tendemos a mirar al pasado constantemente. Necesitamos saber que está ahí, que gracias a él somos lo que somos, estamos donde estamos, necesitamos recordarlo continuamente incluso hay personas que viven prácticamente en el pasado. ¿Es tan importante? Muchas veces me pregunto qué sería de mi vida ahora mismo si alguna nimiedad de mi pasado hubiera sido diferente. Sabemos que el pasado nos ha hecho fuertes, los momentos de sufrimiento nos han curtido y los momentos de felicidad nos han hecho seguir adelante, pero ¿Qué pasa cuando volvemos atrás constantemente? ¿Cuando pensamos que el pasado fue mejor?

Como dice la canción, ¿Deberíamos decir adios al pasado? ¿Escribir un punto y aparte en nuestra vida? ¿Pasar de página o de capítulo? ¿Sería realemente algo bueno? Creo que es imposible dejar de mirar atrás pero también que es imposible seguir adelante sin pasar página, entonces ¿Qué debemos hacer? Todos tenemos un punto de partida definido y un punto de llegada que intenamos definir constantemente. A veces nos perdemos este maravilloso viaje que es la vida pensando en lo que haremos mañana, dentro de un año o planeando nuestra vida. En definitiva, gran parte de nuestra vida nos la pasamos esperando ese momento oportuno en el que, se supone, haremos lo que siempre quisimos hacer. Sin embargo, ese momento llega y no nos damos cuenta o creemos que no es lo suficientemente bueno para nuestros planes. Siempre queremos más, algo más perfecto.

"La vida es lo que te pasa mientras estás ocupado en hacer planes" Jhon Lennon

La mayoría de las personas viven pensando en el pasado, en los errores cometidos, en los puntos de inflexión, de grandes decisiones que no sabemos si fueron las adecuadas. La otra parte del mundo vive pensando en lo que vendrá, en el momento de las grandes decisiones, planean, reflexionan y atan todos los cabos para, llegado el momento, tomar la decisión adecuada. Así, solo queda una parte ínfima de la humanidad que prefiere vivir el presente, no siguiendo la máxima "Carpe Diem" sino disfrutando de las pequeñas cosas que el día a día se nos ofrecen. ¿Cuál de estas posturas es la más productiva, correcta o mejor para nuestra calidad de vida? Supongo que cada uno intenta hacerlo lo mejor que puede. La vida, para mi, es un juego del que no tenemos las reglas, nadie nos ha dicho cuál es la mejor forma de vivir, cómo seremos felices o cuándo llegará Nuestro Momento. "

"En la carrera la fatiga es normal, por eso hay que parar a respirar. Mira, el final es para todos igual" Violadores del Verso


No sé cual será la mejor solución. Supongo que hay que tener en cuenta el pasado en la medida en que gracias a él somos lo que somos, mirar hacia el futuro para hacer realidad nuestras metas o sueños y vivir el presente tal y como nos hace feliz y como nos gustaría recordarlo en un futuro.

"Después de todo sé que nada es permanente y que al impaciente se le olvida la miel del presente" Violadores del Verso

7/9/08

¿Qué Tal? ¿Te Ha Gustado?

¿Por qué los hombres siempre lo preguntan? Supongo que muchas veces es inseguridad o puede que solo curiosidad, pero vamos a ver, llevo media hora gimiendo ¿tú que crees? ¿Me habrá gustado o no?

Hay hombres que se preocupan demasiado por la duración del coito, por los movimientos, por la intensidad de los gemidos... de lo que parecen no haberse dado cuenta es de que cada pareja sexual es diferente. No podemos valorar una actuación por la intensidad de los gemidos porque hay mujeres que no gimen, respiran más fuerte simplemente; hay otras que gritan; otras que gimen poco aunque estén llegando prácticamente al cielo... el abanico de posibilidades es tan grande como el número de mujeres hay en el mundo. Incluso, me atrevería a decir, que dentro de una misma mujer pueden darse todas esas conductas dependiendo del lugar, de la situación, del momento... es tan subjetivo que entiendo que nos pregunten ¿Qué tal? ¿Te ha gustado? ¿Te has corrido?

El problema de esa pregunta es la última parte. Las mujeres, por lo general (siempre hay alguna afortunada por ahi) no tenemos un orgasmo por cada relación sexual que tenemos (ojalá). Si hablamos de orgasmos a través del clítoris probablemente sea más fácil, pero orgasmos vaginales, eso es otra historia. Conozco a muchísimas mujeres que no lo han tenido nunca (yo misma). Por eso, cuando nos preguntan si nos hemos corrido nos encontramos ante una encrucijada. Te puedo decir que sí, que me ha gustado, pero muchas veces cuando les dices que no te has corrido se quedan descolocados y quieren hacer que te corras. Eso a veces está bien, pero ¿cómo le explicas que solo el hecho de la penetración ya te gusta, que no es necesario tener que llegar al orgasmo siempre? no lo entienden.

Entonces, tú estás super a gusto después del coito. Es el típico momento en el que quieres tumbarte y relajarte, disfrutar del momento en SILENCIO. Pero no, porque él se empeña: 1) en que te corras; 2) en hablarlo. ¿No podemos dejarlo para después? Dame solo 5 minutitos y ya hablamos de lo que quieras.


También podemos encontrarnos con el típico motivado. Que sí, que está muy bien que se preocupen más de que tu obtengas placer que de otra cosa. El problema está en que algunos, no digo todos, no entienden que, aunque a las mujeres no se nos levante ningún miembro, una vez que nos corremos tenemos que darle tiempo a nuestro sistema nervioso para que se recupere. Y quieren que tengas un orgasmo tras otro, tras otro, tras otro. Al final la zona vaginal está tan irritada que apenas puedes ponerte las braguitas. El otro tipo de motivación es la duración. Dios mio, hay polvos interminables. Chicos, por favor, los polvos de 2 horas cansan, aburren incluso. Yo pensaba que era rara, que solo a mi se me irritaba la vagina de tanto "mete-saca" pero no. Una vez más, he encuestado a las féminas que me rodean y ¡sorpresa! nos pasa a casi todas lo mismo. Una vez que nos hemos corrido (aunque suene muy mal) seguir un rato nos gusta (depende de la mujer supongo) pero llega un momento en el que el gusto se convierte en aguante y el aguante en aburrimiento.

Nadie sabe donde está el momento justo, depende de la pareja, supongo. Es bueno hablar de ello para llegar a un placer conjunto, pero ¿tiene que ser justo después del polvo? no, por favor.

P.D: todo lo anterior se refiere a un número reducido de mujeres (al que yo tengo acceso) también habrá mujeres a las que los polvos de 4 horas les encanten, que tienen la capacidad de correrse 6 veces seguidas y a las que les gusta hablar después del coito.,incluso dependiendo del día habrá mujeres que les apetezca una u otra cosa... No quiero que tomen ninguno de mis post como generalidad. También hay tios que lo hacen genial, que lo entienden a la perfección y saben cuál es el momento justo. Depende de uno y de otro. El sexo es cosa de dos, y cada componente de ese dos es una singularidad.

(Thanxs Lio!)

4/9/08

Sex and The City

Hace ya casi una semana estoy enganchadísima a la serie Sex And The City, también conocida como "Sexo en Nueva York". Hasta que me puse a verla, la verdad, no me llamó en absoluto la atención. De hecho, siempre pensé que era una chorrada de serie. En cierto modo aún sigo pensando que lo es. Cuatro amigas cuyo hobby favorito es hablar de hombres, analizar sus relaciones amorosas y comprarse ropa y zapatos, en principio, no promete demasiado. No se parece mucho a mi vida, la verdad. Tampoco con la vida que quiero llevar dentro de 10 o 15 años. Pero es divertida y, en cierto modo, en la vida de toda mujer mucho de su tiempo es invertido en hablar de sexo, relaciones y de ropa.


Tarde o temprano hasta las mujeres menos femeninas respecto a ropa, maquillaje, zapatos y bolsos (vease yo misma) acaban cediendo. Siempre hay algún momento de cotilleo y de tonterías varias. Lo siento, pero hasta la mujer más inteligente, poco superficial, elegante, etc etc finalmente saca su vena femenina y marujea un rato con sus amigas/os.

A pesar de ello, no debemos olvidar que muchas veces los hombres son las peores marujas que puede haber. Porque nosotras somos víboras pero ellos pueden llegar a ser crueles. Es una verdad absoluta que las mujeres somos unas cotillas y unas zorras, competimos constantemente con las demás y muchas veces envidio a los hombres porque sus relaciones son mucho más sanas entre ellos. Son "coleguitas". Ahora, al igual que entre nosotras está el típico drama rollo "porque me ha contado X que me has puesto a parir, si tienes algo que decirme me lo dices en la cara eh? eh?", entre ellos está el rollo "caballeresco": "¿Estás mirando a mi piba? ¿eh? ¿eh?

Es cierto, ¿para qué negarlo? todas hemos puesto verde a alguien en algún momento de nuestra vida. Sin embargo, los hombres también lo hacen (y bastante a menudo a demás) pero eso no se dice ni se comenta. Ante la evidencia de que algunos de nuestros amigos hayan estado cotilleando toda la tarde ante unas cervezas las mujeres nos mostramos bastante incrédulas, nos sorprende.

Siempre pensamos que hablarán de fútbol, de culos, tetas y poco más. Pero en realidad, muchas veces (no con tanta frecuencia como la mayoría de las mujeres, eso también es cierto) se cuentan cotilleos sobre amigos desaparecidos ("esa novia que se ha echado, por lo visto hace poco le montó un pollo que te cagas en el bar solo porque habló con la Silvia") o de posibles polvos ("Pues Marta está de puta madre, además me han contado que ya no tiene novio" o "¿Que si María tiene novio? Si, tio pero es un imbécil, van a durar lo que yo te diga") y un largo etc.

Los hombres se ríen de las mujeres que ven series como Sexo en Nueva York. Pero estoy segura de que si hicieran una serie de cuatro amigotes que se pasaran el día hablando de tías, sexo y fútbol, ellos la verían. Apostaría por ello.

Y yo, que quieren que les diga, me parto con los comentarios de Samanta, con la ingenuidad de Charlotte, los comentarios afilados de Miranda y la vida amorosa de Carrie...

P.D: Buscando una imagen para incluir en el Post he desubierto que, de hecho, la adaptación de la serie en versión masculina está en marcha: "Manchild". Ya veremos qué tal se les da el lado opuesto de la historia.


3/9/08

Si No Me Apetece, No Me Apetece



Gracias a Dios las confesiones entre amigas no han pasado (ni pasarán, espero) de moda. Hace tiempo que me viene preocupando un estado de ánimo que, para mi, no era normal: la apatía sexual. Hay temporadas o épocas en las que no me apetece si quiera un pequeño roce sexual. Pensaba que era la única, pero después de encuestar a casi todas las féminas que me rodean resulta que es un sentimiento general. Que hay momentos en que, simplemente, no nos apetece. Los hombres esto, por lo general, no lo suelen entender y para ellos un "no me apetece" repetido en más de 2 ocasiones consecutivas se traduce en: no me gustas sexualmente, la relación ha perdido la pasión, etc etc.

Al final resulta que los hombres también se rayan con estas cosas. Se sienten rechazados sexualmente y, esto, afecta a su "ego", "hombría" o qué se yo. Lo peor de todo es que, después de contrastar experiencias, hay hombres a los que por mucho que les digas que no te apetece y tal siguen intentándolo y les da igual lo mal que tú te sientas. Sé que no lo hacen con mala intención, con la intención de hacernos sentir mal. A lo mejor es que piensan que nos pasa algo similar a ellos: con un poco de magreo y cuatro besos bien dados se les levanta y ya no hay quien les pare. Pues no señor, a las mujeres no se nos levanta nada. Si mi libido está más o menos al nivel del metro de la línea 6 (es decir, muy muy abajo) no va a subir de repente.

Pero claro, muchas veces cedemos por complacerle, por no hacerle sentir mal. Pero ¿y luego? resulta que algunas mujeres se quedan echas polvo y no saben porqué, tienen ganas de llorar incluso. Yo creo que es simplemente porque han hecho algo que realmente no les apetecía y es como un engaño a sí mismas. ¿Y ellos? tan campantes, a gusto tirados en la cama sin siquiera caer en la cuenta de que su estupendo estado de ánimo y relajación ha sido conseguido a costa de que otra persona se sienta mal. Por que no digo que tengan la culpa los hombres, pero es algo que deberían saber. Estoy segura de que, en la mayoría de las relaciones, ellos no se dan cuenta de esto. Si a que ellos no se plantean que su pareja pueda tener un nivel de libido = 0 en determinados momentos, le sumamos que muchas no dicen nada, ni se lo explican, tenemos una ecuación perfecta de incomunicación y frustración por ambas partes.

No quiero generalizar, también hay hombres con épocas de "apatía sexual" (menos, pero los hay) o que entienden que no nos apetezca y lo respetan. Pero, hablando de los que no lo entienden, el estado de ánimo de la mujer empeora cuando ve que a su pareja sexual le da igual el hecho de que a ella no le apeteciera, el hecho de que nos sentimos mal teniendo relaciones sexuales sin ganas. Puede que no apetezca y luego nos entren unas ganas impresionantes de echar un polvo, claro que sí. Pero por lo general si no apetece, no apetece. Y claro, llegan las discusiones: hace una semana que no echamos un polvo, ¿cómo crees que me siento yo? (dice él) y ella: pero si no me apetece ¿qué quieres que haga? ¿te da igual que echemos un polvo aún así? y bla bla (largo etc) al final, por lo general, la mujer cede porque piensa que no es normal que no le apetezca. Pues no señoras, es normal.

Lo peor de la historia es que estas épocas suelen darse (por lo que he sacado en claro de mis "encuestas") cuando la relación lleva ya largo tiempo y puede estar algo desgastada. Cuando en muchas parejas el sexo se convierte en algo monótono y en el que cada uno va a lo que va: a tener un orgasmo. Perfecto, él se lleva su premio, pero nosotras, después de 15 minutos de "mete-saca" no hemos sacado nada en limpio. Porque si por lo menos tuviéramos un orgasmo la cosa cambiaría.


He llegado a la conclusión de que las mujeres nunca, nunca (repito NUNCA) deberíamos hacer eso. Las cosas se hablan y si no lo entiende pues a freir chuchangas, como se dice en mi islita. No sé cual es la causa pero muchas mujeres tienen en mente que debemos complacer sexualmente a los hombres. No sé si es por algún gen que nos queda de la época en que vivíamos en cuevas o porque la sociedad nos hace ver algo así. Lo que sí se es que es super machista y que no debería ser así. Si no apetece, no apetece. Y punto.

También podemos ponernos en el lado contrario. Cuando a un hombre no le apetece echar un polvo, que tiemble el mundo. La mujer, por lo general tampoco lo entiende. Se pone "llorosa" y comienza el: pero ¿qué pasa? claro, ya no te gusto. ¿No te atraigo físicamente? y él: que no es eso, que estoy cansado. y ella: pero si siempre te apetece...

Ese es el momento clave, en el que la parte que lo intenta comienza a intentarlo con más ansias. El punto de inflexión en el que todo cambia es en la parte que recibe los besos, las caricias y las intentonas: si es un hombre probablemente la mujer se lleve consigo un buen polvo. Si es una mujer, simplemente hay un polvo. ¿No han notado la diferencia entre un polvo en el que ambas partes lo desean, en el que los cuerpos parecen tener vida propia, en el que la mente se nubla... y otro polvo en el que simplemente prima la necesidad física de "descargarse" por alguna de las partes?

Una amiga me decía: es que yo prefiero echar un polvo, aunque no me apetezca, a "empujarle" (no sé si usó este término u "obligarle") a tener que masturbarse. Ante estos, queridos lectores, mi cara se contrajo hasta límites insospechados, pensé que nunca volvería a recuperar mi expresión normal. Me quedé blanca y, por supuesto, flipada. Puede sonar catastrofista y bastante mal, pero creo que hemos pasado de un machismo en el que el hombre incluso podía obligar a su mujer a complacerle sexualmente a otro machismo en el que nos "obligamos", convenciéndonos de que es lo correcto, nosotras mismas. Y a todas estas ellos no se enteran de la misa la mitad porque, como siempre, las mujeres no abrimos la boca y les dejamos en la inopia más absoluta al respecto.

El sexo es algo que debería ser disfrutado cada vez que lo ponemos en práctica. No una "obligación de pareja".

1/9/08

BlogDay 2008!




Soy una bloguera horrible.. Acabo de enterarme de que hoy es el Blog Day. Como buena anfitriona tengo que reomendaros los que para mi son los 5 mejores blogs que he leído, que leo o que he descubierto por ahi. Pues bien, aunque tengo una lista como de 20 blogs que leo a menudo (y aunque debería estar estudiando) me apetece un montón! Además de los ya recomendadísimos Chapi Escalata, Imbecilidades de Lo Habitual y El Cuarto Sin Ventana (links a la derecha del blog) tengo unos cuantos más que me gustaría leyeran algún día, en un ratito:


- Regina ExLibris: cargado de ironía y de anécdotas que, como mínimo, hacen que sonria. Regina, librera, te cuenta el día a día en su librería a la vez que te recomienda uno o varios libros. De lo mejor para reir, aprender de literatura y para entender un poco a esas personitas que nos pueden ayudar a encontrar Nuestra próxima lectura.

- Crónicas desde Tokio: interesantísimo blog con fotografías, indicaciones y mil anecdotas en Tokio. El autor, un nómada sin remedio, comienza su blog con la siguiente frase: Hay gente que dice que llegada una edad es hora de asentar la cabeza. Decepcionémosles.
Juzguen por sí mismos.

- Diario de Superwoman: botácora de una super mamá que, con dos pequeñas criaturitas a cuestas, en el que más de un día me he encontrado agradables sorpresas. Hablando de todo un poco, podemos aprender mucho de ella.

- Ni Libre Ni Ocupado: gran blog. Ganador del premio al mejor Blog 20minutos en 2006. El autor es un taxista madrileño que, simplemente, cuenta sus experiencias de cada día. Hay que ver la fauna que hay por ahí suelta.

- Perdonen las Disculpas: llegué a él a través del "diario de Superwoman". Magnífica lectura, me encanta leerlo en cuanto es actualizado.

Ya me dirán que opinan!! Igual debería haber dividido en secciones los blogs (rollo: ciencia, literatura...) pero como la mayoría son blogs para aprender de las personas y no para absorver información sin más no sabía muy bien cómo hacerlo.

Un beso para todos, ahora sí, hora de estudiar! Piensen mañana en mi, mientras sufro en el horrible examen de Derecho Tributario II y deséenme suerte!

¿Te he Contado Ya Lo que Me Pasó Ayer?

Acabo de leer este post y, reflexionando sobre ello, he llegado a la conclusión de que las personas no nos entendemos. Nunca lo haremos. Puede que encontremos un espejismo de entendimiento, un punto medio en el que todo va bien, pero si realmente explicáramos cada cosa que decimos nuestro interlocutor quedaría mudo del asombro. Cierto es que hay cosas que solo tienen un significado, pero muchas veces no es así. Tal y como ocurre en el post que leí, podemos mantener una conversación aparentemente coherente y no estar enterándonos de nada.

Buscando un término medio de comunicación, descubrí (más bien asimilé) que podemos clasificar a las personas, muchas veces, por lo que sale o no de su boca.

Así, podemos encontrarnos (más bien tropezarnos) con personas que lo explican todo y que te cuentan absolutamente TODO lo que se les pasa por la cabeza, tanto si es interesante como si no. Comienzan a explicarte lo que les pasó en la panadería pero, claro, primero tienen que contarte qué ropa llevaban, lo que pensaron por el camino, con quién se encontraron y, por supuesto, quién es esa persona, con antecedentes penales incluidos. Este tipo de personas, cuya incontinencia verbal no siempre es incómoda, no sabe resumir. Simplemente, creen que todo es importante, lo cual, en cierto modo está bien pero hay días en los que es insufrible.

Por su parte, también están l@s MUTIS, es decir, las personas que no dicen "esta boca es mia". Que puedes conocer desde hace años y de repente caer en la cuenta de que no sabes casi nada sobre sus opiniones o su vida en general: ¿Tiene hermanos? ¿Le gustan los macarrones? ¿Qué bebe cuando sale de fiesta? ¿Sale de fiesta? y, en resumen, ¿Cómo es? ¿Le gusta viajar? ¿Le gusta leer?
En realidad son datos básicos de una persona con la que has mantenido una relación durante varios años, pero no lo sabes. Ese es el momento en que empiezas a preguntar, pero claro, la otra persona, acostumbrada a no soltar prenda se siente incómoda. Supongo que a mi también me pasaría si no fuera porque respondo todo lo que me preguntan sin cuestionarme el porqué. No obstante, si tienes una relación de "colega" o "conocido" en el momento en que empieza a fusilarte a preguntas lo mínimo es que flipes y cuando reaccionas ya empiezas a sentirte incómodo.



Todo esto me llevó a pensar que los humanos estamos obsesionados con guardarnos información, con mantener una parcela de intimidad que nadie más sepa que está ahi. Queremos controlar el flujo de información que sale por esta boquita nuestra. Porque hasta las personas que mas hablan tienen secretos, porque hasta ese amigo que no para de hablar en 2 horas guarda información reservada. Información que cree es más suya, más íntima.

Muchas personas no son capaces de conectar con las personas que son más herméticas por eso, porque quieren información sobre ellas y, al no recibirla, se aburren, pierden interés, porque la información para ellos es sumamente importante (o eso parece). Las personas herméticas, es cierto, a veces desesperan porque hay que sacarles la información a cucharaditas, porque no queremos compartir información gratuitamente, es decir, no te voy a contar hasta mi último pensamiento si tú no me cuentas ni lo que hiciste ayer. Pero cuando te cuentan algo, sabes que es importante. No malgastan saliva contándote chorradas, por eso en cuanto abren la boca te sientes especial. Porque así te demuestran que confían en ti, que eres importante.

No por ello hemos de pensar que los que te cuentan su vida en cuanto se presentan son un libro abierto y asumirlo, sin más. Detrás de esa cascada de palabras esconden algo de suma importancia: su mundo, su visión de la vida. Llegar hasta ese manantial es algo increíble porque te sorprenden. De repente un día llegan y te dicen: ayer me acabé de leer un libro sobre el cambio climático/la guerra de vietnam/Nietsche/los filósofos griegos... o te dicen: buah, me encantaría irme de viaje a la Antártida. Y cuanto menos tú te sorprendes. Ahí empieza una conversación que hace que no salgas de tu asombro porque te cuenta y te explica y, joder, aprendes un montón sobre esa persona en apenas media hora. Mucho más que las ochocientas mil horas que te has pasado escuchando historietas variadas sobre el día a día.

Sé que jamás encontraré el punto medio (yo soy de las que padecen incontinencia verbal) pero creo que todos deberíamos poner algo de nuestra parte y, sin pasarnos de hablar, llegar a un mínimo entendimiento. Que si hay un malentendido y lo notas, lo expliques, pero no todo merece ser comentado.

"Nunca Tantas palabras dijeron tan poco"

"Hay miradas que no necesitan explicación"