1/12/08

El Clitoris: Ese Gran Amigo Olvidado

Dice la Wikipedia que el clítoris es el órgano eréctil que se encuentra en la parte superior de la vulva de la mujer. Etimológicamente clítoris en latín significa "Llave".

Así, en frío esa definición puede no significar nada. Pero el clitoris, además, es el único órgano del ser humano que solo sirve para proporcionar placer, no tiene más función que esa. No es como el pene que sirve también para la reproducción, por ejemplo. Tiene 4.000 terminaciones nerviosas que desembocan en él y unas 8.000 fibras nerviosas concentradas, esto es, más que cualquier otro órgano ya sea la lengua o la vagina (que, por cierto, apenas tiene sensibilidad ni terminaciones nerviosas). En algunas mujeres la concentración es tal que no soportan el contacto o estimulación directa del clítoris porque resulta excesivo, incluso llega a dolerles.



El clítoris es el gran olvidado en el mundo sexual. Pero, además, anatómicamente hay muy poca información al respecto. Es un área de investigación en la que, actualmente, solo se centran unos pocos investigadores (en su mayoría mujeres). En los libros de anatomía no suelen aparecer referencias a él o dibujos que muestren un poco más cómo es.

Para que puedan ver la poca importancia que se le ha dado históricamente al clítoris pondré un ejemplo. En 1559 un anatomista italiano fue el primero en estudiar en profundidad, e incluir el clítoris en un dibujo anatómico de la mujer. En la misma época, su maestro, realizó un detallado estudio sobre los órganos reproductores femeninos (sin incluir el clítoris). Éste último tuvo un gran éxito, siendo el primero totalmente ignorado.

100 años después algunos anatomistas comenzaron a darle gran importancia al clítoris porque pensaban que si la mujer no llegaba al orgasmo no quedaría embarazada, o lo que es lo mismo, porque pensaban que tenía una función reproductora. Nuestro gran amigo vuelve a caer, de nuevo, en el olvido de los estudiosos hasta 200 años más tarde cuando empiezan a incluirlo ya en los libros de anatomía y la medicina comienza a prestarle más atención.

La época de Hipócrates fue grandiosa para el placer femenino. Como pensaba que al tener un orgasmo la mujer expulsaba (igual que los hombres) esperma, y que ésto era indispensable para la reproducción, se investigó profundamente como estimular a nuestro "botón mágico". Esto contrasta con ello el hecho de que en las últimas décadas de 1800 y las primeras de 1900 se realizaban por toda europa ablaciones a las mujeres porque a algún brillante médico se le dió por decir que era el causante de la "histeria femenina" y que las mujeres, al tener un orgasmo, perdemos el control, por lo tanto lo mejor es extirparlo.

Actualmente, tan solo un 30% de las mujeres pueden tener orgasmos durante el acto sexual sin estimular el clítoris. Eso nos deja con un 70% (asimilen ese alto porcentaje) de mujeres que solo pueden obtener placer a través del clítoris. Los hombres no suelen prestarle mucha atención, no sé porqué asumen que percibimos más placer a través de la penetración de la vagina.

El clítoris ha sufrido una clara discriminación en todos los ámbitos de la vida. No se habla de ello, en las clases de Sexualidad que imparten en los institutos y colegios no se nombra, no se estudia anatómicamente... Es como si no existiera. Nosotras tenemos que adivinar que existe y los hombres saben de su existencia por las películas porno, básicamente.



Los hombres tienen que tener en cuenta todos estos datos y darse cuenta de que si realmente quieren que su pareja sexual obtenga placer tienen que hacer del clítoris su mejor amigo. Por lo menos, saber donde está y qué hacer con él. Os dejo una imagen con flechitas y todo por si alguno tiene dudas :)

La vagina está bien para la penetración pero donde esté el clítoris, amigos mios, ahí que hay una mujer satisfecha detrás.





Si a alguien le interesa más saber sobre el tema, muchos de estos datos los he sacado de un documental que se llama "El Clítoris". Se puede ver online y no dura más de una hora. Los 30 primeros minutos no tienen desperdicio.